Civil War


¿Acaso alguien cree que hemos cambiado?, ¿Miles de años de evolución y avances nos han hecho realmente  mejores individual y colectivamente?, ¿Podemos acaso evaluar lo que está bien y lo que está mal de forma objetiva? No hay razón alguna para temer la vida, pero si hay razones para temer al ser humano, individuo capaz de crear de la nada leyes y costumbres que atan las consciencias de todos y marcan la frontera de lo correcto. El sentido de nuestra existencia, esa es la clave que andamos buscando desde tiempos inmemorables, cada uno la busca condicionado por su entorno, en lugares distintos, creyéndonos por tanto diferentes a cuanto existe y con capacidad suficiente para valorar nuestra situación. Pero ¿y si nos estamos engañando?, ¿cómo podemos estar seguros de que estamos en la dirección correcta?, ¿cómo sabemos que estamos en una dirección?... No podemos objetivamente, nuestra única esperanza para protegernos de nosotros mismos somos obviamente nosotros mismos, concretamente una parte de nosotros mismos, la parte de la sociedad que es relativamente crítica con el ser humano, que no acepta la vida porque sí, que cuestiona cada paso que damos, una parte fundamental de nosotros (aquí me viene muy bien la idea del superhombre de Friedrich Nietzsche) y cuya regulación es la educación.

No está todo perdido, ni muchísimo menos, la historia parece repetirse constantemente, pero aunque despacio, el ser humano parece reaccionar. Tenemos razones para creer que el ser humano pueda alcanzar algún día un estado en equilibrio con su existencia y con el universo. Si esto no saliera, probablemente perderíamos nuestra foto particular del universo.





"Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana, aunque de la primera no estoy seguro" Albert Einstein

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